Días lluviosos, creo que no solo en el cielo. Fin de semana de mujeres, golpes y alcohol. Una bailarina de striptis, morena, loca, atrevida... de las que me gustan a mi, guapa y divertida.
Nos conocemos con un morreo, vaya presentación. Fotografías, bailes y sonrisas, cuando todo termina concertamos una cita.
Lluvia en mi cabeza, a Barcelona en tren, iba hacia Vic, menos mal que no llegué. Día gris, un encuentro, cansancio...otra situación. Todo va bien, bueno, normal, depende como se quiera mirar. ¿Cocino yo? Mejor voy a buscar algo de jalar.
Llega el cansancio, la morriña de después de comer, y aparece el listo de Morfeo y se lleva a esa mujer. Me bato en retirada, ya que hay que saber perder, salgo a la calle y me la encuentro otra vez, a ella, la fría lluvia, la que parece no quererme abandonar.
Más railes, en busca de otra morena que no quiere salir de mi cabeza. Otro encuentro con esa mujer, siempre agradables aunque no salgan bien. Más besos, cerveza y esa mirada, y joder! esos ojos siempre me atrapan. ¿Nos vamos a cenar? Digo yo que algún día tendrá que aceptar... Mala suerte, otra vez tarde, me despido de la morena y otra vez momento de retirada.
Otra vez en busca de otro tren. Otra vez mi compañera cristalina, aunque esta vez no voy solo y empapado, si no que por un vestigio de suerte voy húmedo y acompañado.
Un vagón, alguna mirada, besos lascivos y mano bajo las bragas. Pero hay que joderse, solo me llevo eso, porque tiene el coche estropeado y vamos en un vagón de metro.
Ya estoy en mi ciudad, y mi ultima compañía femenina se ha largado ya. Otra vez solo con la lluvia, jodida, húmeda y fría lluvia. Una última visita, esta vez a un colega, unos porros, unas risas y a desahogarme con sus orejas.
Otra mañana, más lluvia, otra vez a por el tren. Bajo y subo en otro, y de mientras un poco de humo que me sienta genial.
En busca de mi dinero voy a parar a donde hasta hace unos días estaban las oficinas. Cartel de traslado... otra dirección, camino de Gran Vía entre la puñetera lluvia fría.
Otra puerta, esta vez la buena, me abre una rubia y me deja pasar. Pido mi dinero, que para eso lo había ganado, y me dan la noticia que de día me he equivocado.
Viaje estúpido, lluvia, dinero y tiempo gastados. Aprovechando llamare a un viejo amigo, ya que estoy por aquí aprovechare para salir. Mal momento para la llamada, la jodida resaca lo tenia atrapado en la cama.
Llamare a alguien para comer...mierda! no hay casi dinero...bueno, como siempre algo se podrá hacer...joder! sin batería... y en Barcelona...y bajo la lluvia fría....
